lunes, 19 de marzo de 2007

Capitulo cinco

NOTA DEL AUTOR: Se avisa que los sabados y domingo no se escribirá la historia, sino que irá ahora todos los lunes, y los viernes. ATENCION!

Capitulo cinco

Las nubes danzaban en el cielo, lentas y imperecederas, suaves como algodón, prístinas y grandes. No corría demasiado viento y la caminata era agradable.
-En 1945 las tierras de cultivo eran la principal atracción de Villa Los Cipreses-le dijo la Anciana, que caminaba junto a Isabel en dirección a la casa de la primera.-Pero vinieron tiempos duros y cayó sobre este pueblo el frío más cruento del que se tiene memoria.-pasó el niñito que había gritado "la luz" en su triciclo, sin dejar te tocar el timbre.
-¡Hasta luego, Señora!-dijo, hasta perderse por el pasadizo que había mas a la izquierda del almacén. Isabel solo inclinó la cabeza en además cortés. Miró a la anciana.
-Y bien. Nos quedamos sin nada. La señora del Almacén, Teodea, encarga suministros al exterior. Por una parte, siempre estamos abastecidos.-la viejecita miró a Isabel-Fue en 1974 cuando llegó él a nuestra Villa.
Toño había abandonado su lugar en la muralla y por más que Isabel lo buscó no lo encontró ni en la colina y ni regando el pasto.
-Tenía 34 años cuando llegó-le dijo, deteniéndose-¿Quiere pasar?
Isabel vio que la casa de la abuelita tenía el aspecto viejo y antiguo de las personas que llevan viviendo mucho tiempo en un mismo lugar. Era de color rojo carmesí y de ladrillo en su totalidad. El antejardin estaba seco, sin vida, y solo quedaba tierra donde antes había habido alguna flor, pasto o lo que fuera. La viejecita abrió la puerta con la llave que le colgaba de entre los pechos y con una inclinación de cabeza la invitó a pasar. Isabel lo hizo.
La casa era acogedora, con cuadros, una mesa con mantel blanco, y los sillones hundidos de miles de gentes que se habían sentado alli mucho antes que ella. La saludó un gato gris, que se frotó entre sus piernas.
-Ese es Melquiades.-le anunció. Cuadros, eso también adornaba la casa. Fotos de su matrimonio, paisajes, misivas religiosas y adornos de cerámica en la mesita de centro. La invitó a la cocina, grande, espaciosa, y a sentarse a una mesa. El refrigerador, con esas letras imantadas, se escribía: NO CODICIES EL BIEN AJENO.
Se sentaron.
-La casa en la Colina-le dijo la viejecita, que le daba la espaldas, pues preparaba una taza de café para ella, y una taza de te para la visita-La construyó Toño. El solo. Es buena gente.-La miró-.Se como se siente con respecto a él.-le devolvió la espalda.
-Pero ¿que es La Cuota?-una taza de te hirviendo se poso frente a Isabel-.Gracias- La viejecita se sentó al lado de ella.
-Eso es algo de lo que tenemos prohibido hablar. Sobre todos a los que vienen del exterior-era segunda vez que escuchaba a la viejecita hablar de "exterior".
-Pero es una cantidad en dinero? Por lo menos, eso me dieron a entender a mi y a...
-A propósito...-le interrumpió la viejecita-Mi nombre es Merced. Doña Merced.
Isabel se sonrío.
-Ya sabe... soy vieja, y olvidadiza. Las buenas costumbres con desconocidos como usted...
Isabel tomó un sorbo de su te.
-¿Galletas?
Isabel negó con un gesto de la mano.
-No todos tenemos estas frases-dijo, apuntando el refrigerador-.Solo diez de nosotros. Los más antiguos.
-¿Los diez mandamientos?
La viejita asintió.
-No permitiremos que esto cambie-le dijo-.Yo le recomiendo que se acerque a Toño. No muerde. AMA A TU PRÓJIMO...-dijo, sin terminar la frase.
-Pero, y ¿la casa en la colina?-preguntó Isabel.
-La construyó toda él-repitió-.Nos suministra de energía.
-¿No hay una central ni nada de eso?
Doña Merced mascó una galleta y tomó un sorbo de su café.
-Ya es tarde-le dijo-. Su marido debe estar preocupado.
Esto la sobresaltó. Ni siquiera se había acordado de su marido. Y pensó: La ducha. Bueno, a estas alturas ya debería estar esperándolo para el almuerzo. Ni siquiera habían tomado desayuno juntos. Si solo había salido a comprar. Le dio las gracias a Doña Merded, ésta la invitó a que volviera, y le insistió que:
-Hable con Toño. La cuota. No se olvide.
Fue a su casa con más preguntas que antes. Todo parecía llamarle la atención.
Y vendría más.

continuara... VIERNES 23 PRÓXIMA ACTUALIZACIÓN... deje su mensaje de voz... o su mensaje escrito.

1 comentario:

Infinitas letras dispersas dijo...

Hola Huachi
espero que te bien
aquí saludandolo
espero que estes super bien amigo
cuidate mucho!!


Magda